“La ignorancia es madre de la admiración”
PUNTO DE VISTA
En este proverbio se relacionan dos respuestas muy propias de la naturaleza humana, la ignorancia y la admiración respecto de la creación que somos parte.
El contenido esencial del proverbio está en la Gracia del Señor, porque toda sorpresa o extrañeza que alguien (o algo) provoca en una persona por ignorancia (o desconocimento) es contemplación a la obra del Creador, siguiendo el pensamiento agustiniano.
Cabe comentar este proverbio con un enfoque comparado entre admirar todo cuanto nos sorprende al correr el velo de nuestra ignorancia, y la respuesta de una conducta que nos enseña a aprender de lo descubierto (o revelado) para perfeccionarnos.
A más sabiduría, mayor ignorancia y mayor admiración por la creación. Porque: “A mayor fé, mayor razón, pues la fé sin razón no es fé”.
Esta máxima agustina nos propone una paradoja por ser una figura del pensamiento que aparentemente envuelve una contradicción entre sorprendernos por lo ignorado para mejorar nosotros mismos, y por el contrario caer en la tentación de la ignorancia por adulación que se hace a una persona para conseguir un favor o ganar su voluntad.
En suma, reaccionar por admiración ante la ignorancia para mejorarnos a sí mismos es alabar la Gracia del Señor, no es así por adulación a otro.
¡Señor, ilumina nuestra razón para aprender de la ignorancia!
¡Señor, aumenta nuestra fé para no caer en la tentación!
¡Señor, no permitas que nos separemos de ti!
Miércoles, 30 de septiembre de 2020.
