“La verdadera libertad consiste en la alegría del
bien obrar, y es también piadosa servidumbre por la obediencia a la ley” (E
30,9).
PUNTO DE VISTA
El contenido esencial de
este proverbio está en la alegría del bien obrar, componente clave del amor de
Dios para con la libertad del ser humano, en su vida de relación por obediencia al mandamiento máximo de amar al prójimo como a uno mismo.
No cabe forma alguna de libertad
por amor del cual se pueda propiciar mal alguno, por cuanto quien actúa movido por la
alegría del bien obrar puede amar y hacer lo que quiera en uso de su libertad.
Para el pensamiento
agustiniano actuar con libertad movido por la alegría del bien obrar es ley y reflejo
de la gracia del amor de Dios en cada ser humano, que nos dice desde nuestro
interior que somos libres para hacer lo que se quiera sin posibilidad de hacer
mal alguno por mandato de Dios.
"Una
oración Dios siempre la escucha":
¡Señor, fortalece nuestra alegría de obrar bien por medio del amor!
¡Señor, protege nuestra libertad en obediencia a la ley de Dios!
¡Señor, no permitas que nos separemos de ti!
Jueves, 30 de noviembre de
2023.